Hola Papás,

en esta entrada de nuestro blog queremos hablaros del movimiento libre en el niño y cómo lo trabajamos en la escuela infantil bilingüe en Majadahonda Greenleaves Montessori.

El movimiento libre en la Escuela Infantil.

¿Aprenden los niños a moverse solos o necesitan de nuestra ayuda? …

En la escuela infantil en Majadahonda trabajamos el movimiento libre en los niños ofreciéndoles un entorno seguro y preparado, con materiales adecuados a sus necesidades, a su tamaño y a su nivel de desarrollo.

El movimiento del niño/a es libre y está liberado de cualquier voluntad y consiste en dejar que el bebé se mueva libremente y sin intervención del adulto.

Gracias al movimiento libre, el desarrollo del niño es un aprendizaje continuo en busca de la conquista de la independencia.

Movimiento libre… acompáñame en el camino, tengo otro ritmo pero puedo hacerlo solo…

El ser humano nace programado para conseguir el desarrollo motor que le lleve a caminar erguido sobre dos pies.

El niño no necesita que el adulto le enseñé a darse la vuelta, a arrastrarse, a gatear o caminar… pero sí necesita un adulto que le acompañe al 100%, que esté a su lado para satisfacer sus necesidades básicas.

El adulto prepara el espacio, escoge los materiales y diseña un ambiente seguro, tranquilo y rico en estímulos que permita al bebé tener libertad de movimiento, autonomía y capacidad de escoger según sus intereses.

Algunos de estos materiales pueden ser las rampas, los módulos de madera de diferentes, alturas el triangulo Pikler…

En nuestra escuela infantil en Majadahonda hemos prepaprado los espacios de la escuela para que los niños puedan desarrollar el movimiento libre con total seguridad.

Estos materiales fomentan el movimiento libre, los primeros juegos, el descubrimiento de sus propias capacidades y la construcción de su imagen corporal, y permiten que el bebé vaya desarrollándose a nivel motor acorde a su maduración, acorde a su desarrollo evolutivo.

En Greenleaves Montessori American Scholl, en Majadahonda, preparamos el espacio y dejamos el tiempo necesario al niño para que pueda empezar a conocer y controlar su cuerpo, a controlar sus movimientos.

Así el niño podrá desarrollarse de una forma natural y feliz y conseguirá todos los hitos del desarrollo motor en los primeros 3 años de su vida.